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Todo puede ser más de lo mismo... o no
Date cuenta...
compartimos el mismo sol,
el mismo aire cautivo,
las mismas penas y el mismo desengaño.
Date cuenta...
no hay lugar dónde escapar,
las magnolias sufren la esclavitud
del mismo modo acá y allá.
Por más que lo intentes
no hay túnel que te conduzca
lejos de tu barrio.
Todos las cuadras
son la misma cuadra,
el vecino el mismo vecino,
el hambre el mismo hambre.
Ni lejos ni cerca
te salvan las huidas homicidas.
Sólo trepando el límite absoluto
de tu propia piel
se refugia, libertaria,
tu irreverente
voluntad subversiva
de amar.
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